Guía de uso de cintas magnéticas: aplicaciones, cuidados y recomendaciones

Las cintas magnéticas son soluciones funcionales y versátiles que combinan flexibilidad, facilidad de uso y una fijación segura sobre superficies metálicas. Se fabrican a partir de un material plástico flexible que contiene partículas magnetizadas —habitualmente ferrita de estroncio, aunque existen versiones reforzadas con neodimio para aplicaciones que requieren mayor fuerza—. Su amplia variedad de formatos y espesores las convierte en una herramienta indispensable en entornos industriales, comerciales, educativos y creativos. No obstante, para garantizar su durabilidad y mantener su rendimiento, es fundamental conocer sus características principales y las buenas prácticas de uso.

1. Ámbitos de aplicación

Las cintas magnéticas están diseñadas para adherirse a superficies metálicas, ofreciendo una solución rápida, limpia y reutilizable. Entre sus usos más habituales destacan:

  • Rotulación flexible: Son ideales para etiquetar estanterías metálicas en almacenes, comercios o archivos. También permiten organizar cajones, bandejas y estantes, facilitando la identificación temporal o permanente de productos.
  • Unión de materiales no magnéticos: La versión adhesiva de las cintas permite unir dos objetos cuando al menos uno de ellos no es metálico, creando un sistema de sujeción temporal sin necesidad de herramientas.
  • Decoración y señalización: Las láminas magnéticas de colores pueden recortarse para crear figuras, símbolos o señales destinadas a pizarras, escuelas, talleres, conferencias o presentaciones.
  • Fijación de información: Son muy útiles para mostrar estadísticas, diagramas de procesos o gráficos codificados por colores mediante marcos magnéticos reutilizables.
  • Sujeción de fotos y objetos ligeros: Gracias a las placas y láminas adhesivas, es posible fijar fotografías o elementos decorativos sin perforar ni dañar superficies.

2. Temperatura de servicio

Para mantener su fuerza magnética y evitar deformaciones, las cintas deben utilizarse dentro de un rango seguro de -20 °C a +85 °C. Exponerlas de manera prolongada a temperaturas superiores o inferiores puede deteriorar su estructura interna y reducir su capacidad de sujeción.
Durante el almacenamiento, se recomienda conservarlas a temperatura ambiente, en un entorno seco y alejado del polvo.

3. Uso en exteriores

A diferencia de los imanes metálicos, las cintas magnéticas no se oxidan, lo que permite emplearlas al aire libre. Sin embargo, una exposición prolongada a los rayos UV puede endurecer el material, volviéndolo quebradizo con el tiempo. Por este motivo, se aconseja revisarlas periódicamente y reemplazar cualquier sección dañada o decolorada.

4. Propiedades químicas

Estas cintas están fabricadas a partir de un compuesto plástico elastomérico mezclado con polvo magnetizado. Cumplen las normativas RoHS, lo que garantiza que no contienen sustancias peligrosas.
En cuanto a su reacción frente a agentes químicos:

  • Son resistentes al agua, alcohol y a la mayoría de limpiadores domésticos.
  • Pueden deteriorarse con ácidos, aceites y derivados de hidrocarburos.
  • Cuentan con un revestimiento exterior de PVC, que ofrece protección adicional.

5. Propiedades físicas

Las cintas magnéticas destacan por su flexibilidad, facilidad de corte y capacidad para adaptarse a superficies planas o ligeramente curvas. Su estructura permite una magnetización uniforme, lo que garantiza una sujeción homogénea en toda la longitud del material.

6. Recomendaciones prácticas

Para prolongar su vida útil y asegurar un funcionamiento óptimo, conviene tener en cuenta estas pautas:

  • Mantenerlas alejadas de imanes muy potentes que puedan desmagnetizarlas.
  • Almacenarlas en posición plana, protegidas del polvo y la humedad.
  • Revisarlas con regularidad cuando se utilicen en exteriores.
  • Evitar el contacto con químicos agresivos.
  • No someterlas a torsiones o dobleces excesivos, que podrían dañar su estructura interna.

m Sobre nosotros

Magnet Plastic, consultoría técnica en imanes permanentes e inyección de termoplásticos.